Panza, pancita, panzota

Uff…¡cuántos meses sin escribir! el tiempo transcurrió, sin darme cuenta, de la manera más linda. Un día la pancita se empezó a notar y las burbujitas comenzaron a sonar. Eran las primeras señales de vida dentro de mí, un ser pequeñito estaba creciendo y todo se conectaba con él, mis pensamientos, mi energía, mis emociones, mi cuerpo.

Quizás esto te esté pasando a vos, o a tu mujer. Es un momento maravilloso de la vida, y es una bendición, sin embargo podemos sentirnos mal, desconcertados o angustiados. Para nosotras es un cambio hormonal MUY grande y para ellos es difícil de comprender porque no lo pueden experimentar. La panza crece y nos sentimos raras, nuestro cuerpo va cambiando y ya no somos las mismas. Hay días que nos vemos espléndidas y otros donde no saldríamos de casa. Nos metemos para adentro y es lógico, porque adentro está nuestro bebé y deseamos verlo, imaginarlo, sentirlo, saber que está bien. El movimiento es, una vez más, sinónimo de bienestar, si no se mueve hay que avisar a nuestro médico. Lo mismo nosotras, si nos quedamos quietas el embarazo se hace cuesta arriba, las piernas se hinchan, la espalada duele, la grasa de los antojos se acumula, el aire es escaso y la no liberación de endorfinas nos da una sensación de tristeza. Si trabajás, no dejes de hacerlo hasta que el cuerpo te lo permita, y si podés realizá caminatas diarias aunque sean tramos cortos. Hasta un mes y medio antes de parir tomé clases de spinning, y a veinte días del parto dejé de trabajar. No te lo aconsejo por los kilos de más, sino por las consecuencias que ello trae: edemas, colesterol alto, diabetes, presión.

Y sentite linda porque lo estás, te lo aseguro, las panzonas nos ponemos bellas, tenemos otra luz en el rostro. Creele si te piropea, y aprovechá a tomar su mano y llevarla hacia la panza, que te acaricie, que sienta las pataditas, que le hable al bebé. Recordá que el papá no lo lleva como nosotras nueve meses y debemos ayudarlo a conectarse con él.

Estar embarazada es el estado más pleno, vivilo despacito, disfrutá cada día, cada nueva sensación. Son sólo nueve meses, únicos, y pasan volando…como este tiempo sin compartir con ustedes, casi casi un embarazo.

Esta entrada fue publicada en Salud y etiquetada , , , . Guarda el enlace permanente.

3 respuestas a Panza, pancita, panzota

  1. Mirta dijo:

    Hola!!! Cuánto tiempo sin escribir, y vino «recargado» el consejito. Es re lindo ver, tocar, y acariciar las pancitas de mamás. Pensar que antes las ocultaban. Las mujeres se ponían vestidos cual sotanas (ja). Ya para mis embarazos se mostraba un poco más, pero todavía nos sorprendíamos al ver a las brasileñas lucir sus embarazos con bikinis. Nuestra cultura nos hacía ver una imagen antiestética. Aplausos para las pioneras en hacer totalmene visibles las panzotas 🙂
    Pero más allá de la imagen está el nido, el albergue, el abrigo y la cuna de nuestros hijos. Casita viviente que aloja nueve maravillosos meses esa vida, que será nuestra vida, nuestra prolongación.
    Sí Vani. Tenés razón hay que disfrutar el embarazo. Estar activa y compartir cada momento posible con las manos, los besos del papá.
    Abracito doble…

    Me gusta

  2. ANAHI dijo:

    VANI, HERMOSA, EL EMBARAZO ES EL MILAGRO DE LA VIDA EN NOSOTRAS, EL AMOR MAS ALLA DE TODO.
    TE VES HERMOSA COMO SIEMPRE
    TE QUIERO

    Me gusta

  3. luciana dijo:

    que lindo Vani! tal cual lo que describis del embarazo, a mi me paso algo similar… un beso enorme!

    Me gusta

Deja tu comentario

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s